Neruda y yo - III


"El vino abre las puertas con asombro y en el refugio de los meses vuelca su cuerpo de empapadas alas rojas"...Me dijo Pablo.

   "Y esas alas saben batir en el labio
azotando de dulce las aguas amargas de las lágrimas,
y viste de escarlata los sabores del olvido
como un faro de sopores en un cielo de espumas marinas.

   Ahora llega la noche que se ocultaba a las veras del mundo,
tímida como el beso cuando es deseado,
tibia como los besos tibios que saben a amor mudo,
y abre la noche los candiles en las velas,
agitando en el viento las luces de un sol añorado
y que a la vez el amor troca en gusto por sus frías estrellas.

   Y llega ella que no llegaba y el vino aún en la mesa.
   Y ella de labios de vino y besos de copa,
abre los brazos pero aún al abrazo no besa:
   -"Aquí esta noche -dice- me esperas con una sola copa".

   Y ella que no amaba y yo que amaba tanto,
enjugando el recuerdo de no tenerla pero aquí de vuelta,
avivado el pecho del fuego esa noche solo media hoguera:
   -"Sol y luna -dije- de la misma luz que les es manto,
comparte la una cuanto al otro le rebosa".

   Le dije yo.


- Jacques Pierre
El Club de los Libros Perdidos. Con la tecnología de Blogger.